José Pérez-Guerra sobre GUIL, Madrid (1985)

Artículo original de José Pérez-Guerra Sánchez (R. Arte y Exposiciones, 1985)

Mariángeles Lázaro Guil, en el Club Financiero Génova (Madrid)

Polimorfismo de Mariángeles Lázaro Guil

Piensa, investiga, crea. Mariángeles Lázaro Guil (Almería, 1959) nos trae a la sala de exposiciones del Club Financiero Génova, de Madrid, una obra original, muy fresca, llena de sugerencias, unida toda ella por el título «Espacio y luz». Es un presentar y representar la vida misma, el ser humano en su hábitat, las intimidades que se traslucen porque ellas son la esencia de la persona. La colección sorprende por su variedad —óleo, técnica mixta, acuarela; madera, papel, tela dentro de idénticos clamores— y por la valentía, tanto a la hora de plantearse una cuestión como de resolverla.


Es la inquietud del pintor la que hace al artista, y esa inquietud se refleja en cada obra de Guil, que así firma. Pintura que nace de un posible esbozo, de un plasmar la figura humana o su entorno, de un infundirle el espíritu que anima y ofrece todas las posibilidades de seres y cosas. Para ello sus figuraciones coloristas se complementan con una singular hibridación, con un rayado de cordel, vibración, visualización polimorfa que adquiere relieve y movimiento.

"Los hilos con los que se 'vela' el cuadro yuxtaponen volumen sobre un fondo de caldos transparentes del que viven en amigable simbiosis: si acentuamos la vista de perfil, el tapiz predomina sobre la pintura (de ahí que la combinación del color no sea indiferente), para dejar ver el cuadro poco a poco, conforme lleguemos a la contemplación frontal."
—Juan Manuel Gómez Segade

Mariángeles Lázaro Guil reside en Granada desde su infancia. Se graduó en la Escuela de Artes Aplicadas, especialidad de cerámica; en 1982 ingresó en la Facultad de Bellas Artes Santa Isabel de Hungría, de la Universidad de Sevilla. Ha realizado varias muestras colectivas: en 1982 sorprendió con su primera exposición individual, en el Colegio Mayor Isabel la Católica de la Universidad granadina. Posteriormente ha expuesto en Ámsterdam y en Málaga.


Ha obtenido premios y es autora de la escultura mural en cerámica de la Delegación del Ministerio de Educación y Ciencia de Granada. Entre sus óleos destacan las transparencias de sus desnudos: tiene buenos retratos en técnica mixta y excelentes acuarelas donde la figuración se nos va por los cerros de Úbeda para encontrarse consigo misma.

Vázquez Díaz y quince pintores frente al mar

La galería Infantas, en el número 18 de esta calle madrileña, abre sus puertas con una interesante muestra sobre temática marina. Temática tradicional, muy nuestra, que, como señala Campoy,

"Debido tal vez al centralismo terrícola de la 'escuela de Madrid', el mar se retira mucho de la pintura española contemporánea. Fue un bajamar que vació nuestra pintura, con algunas excepciones también."
—Campoy

De esas excepciones se nutre la exposición de la nueva galería, que encabeza con un buen paisaje del maestro Daniel Vázquez-Díaz y sigue con otros maestros como Agustín Redondela y Rafael Boti, Guillermo Vargas Ruiz y José Lapavese del Río; Abuja y Gloria Merino, Amalio y Alcover, Waldo Aguilar y Rafael Martínez Díaz, Eugenio López Berrón y Teodosio Manzano, López Alarcón, Juan Garcés y Luis Cajal.

José Pérez-Guerra

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